Me reconozco como mujer resiliente y con mucho poder de vulner(h)abilidad. Sí, has leído bien, soy hábil en mostrar mis puntos débiles, y eso es positivo, porque me hace una profesional transparente y directa.

Mi deseo por acompañar a personas empezó en el momento en el que inicié mi escucha activa de historias, experiencias y vivencias… es decir, desde 2016 al finalizar mi grado de Trabajo Social en la Universidad de Barcelona, pues fue el momento en el que mi experiencia profesional se inició y continuó hasta día de hoy, dónde mi formación se ha quedado completamente centrada en el feminismo, la igualdad, el bienestar personal y social. 

He trabajado a nivel individual, comunitario y grupal, la cual cosa me ha nutrido y aportado grandes conocimientos y lecciones de vida, porque en la intervención social y educativa jamás una puede dejar de aprender. He acompañado situaciones familiares, de violencia machista y de género, de infancia y adolescencia, de salud. procesos migratorios, desahucios. Duelos y pérdidas. Encuentros personales y culturales. En definitiva, llevo en mi maleta profesional rayos de luz de personas que han dejado grandes conocimientos en mí.